Haceme caso, esperá a que te llame, pero mientras llamá a otro. Agarrá tu banco suplente y armate un partidito de reserva. Divertite. Dejá que te emboquen, que festejen sus goles, pero mandalos al banco antes de que se les suba la fama a la cabeza. Llamá a tus amigas y salí a putanear ¿quién te dice que no hay algo mejor por ahí? Empedate, enfiestaste, no seas sana (pero cuidate), dejate de joder que todavía hay cabezas que cortar, y ni te digo velas por soplar. Y como dice el tango: cagate en los machos! El hombre es problemático febril, el que no ronca, se mama, y el que está bueno, es un gil. HACEME CASO!