Ya estamos todos hartos de las fábricas de barbies. Todas las chicas pretenden seguir un mismo ideal, pero, ¿dónde ha quedado la autenticidad de las personas? Cada uno de nosotros, con nuestras virtudes y nuestros defectos, tenemos nuestra propia personalidad, somos así, no debemos cambiar porque todos hagan lo mismo. Sé tu mismo, da igual lo que piense la gente de ti. Seguro que serás más feliz que esa panda de clones.