Cielo, vuelo, tierra, sol.. amor.

Quiero ser el cielo, quiero ser el sol. Quiero poder volar, quiero poder ser la tierra. Quiero despertarme y ver tus ojos. Tal vez pida mucho, tal vez poco. Cómo te sentirías vos? Que tanto tienes para dar, si todo lo dado fue en vano?. Me ves, como un caso casi en vano, dí todo lo que podía dar, mi mayor prioridad fue tu felicidad y mi mejor anhelo fue tu sonrisa.  Quiero probar un beso, quiero probar tu mirada, quiero que veas lo que sos, lo maravilloso, lo asombroso..  Estoy en la racha, quiero dar más y colocas una pared de ladrillos en mi frente. Que pasó con el tiempo de amar? Dejaste que todo esto se absorbiera, increíble el frío que tiraste hacía a mi. Intento ser fuerte y decirme :"Isabella, son tiempos grises, pronto aclararán". Pero cuanto pueden tardar en aclarar? Es tan poca la suerte? tan poca la esperanza?. Quiero que veas el sol. Quiero que seas el cielo.  
Quiero que vueles a mi lado, quiero que puedas ver mis ojos al despertar. Es tan poco lo que me das y tan poco el abrigo. Quiero que seas el sol, mi sol. Quiero que seas el cielo, mi cielo. Esto no puede terminarse en estos momentos, tenemos toda la vida para  discutir!, tenemos toda la vida para decir cuanto menos nos queremos y cuando más nos deseamos. Adiós a todos, cerramos la puerta y te sigo amando día a día.  No quiero ser la típica relación monótona, no quiero que nuestra solución sea terminarlo. Quiero luchar, por que nadie nos avisó que en esto siempre habrá días felices. Tendremos cosas peores que esta y quiero enfrentarlas a tu lado. No tenemos un manual, ni fecha de prevención. No tengo miedo si me das tu mano. No puedo ser la voz en tu cabeza, ni la razón en tu corazón, si quieres irte, haré hasta lo imposible para entenderte. No digo que te esperaré, esta de más aclarar. Pero no, sigues aún aquí. Entiendo tu miedo, y comprendo la posibilidad de no dar un paso más. Tal vez lo que vea sean nubes, y barro, la lluvia en el panorama y las gotas resbalándose en mis mejillas. Es fácil notar que lloré?.  Martes, son 7 las horas que perdí tu perfume, tus besos, tus abrazos. Maldita la suerte de quererte aunque se caiga el mundo y maldita las veces que prometimos llegar al cielo. Siento que todo esto sucedió por algo, no soy buen partidaria de esta frase, pero al menos lo siento y eso querrá decir algo. Gracias por ver el sol conmigo. Gracias por ser mi cielo, mi tierra. Gracias por darme la sensación de volar y demostrarme que puedo sentir cosas fuertes. Gracias más que nada a vos, compañero y amor, por tu existencia y tu armonioso recuerdo.